La Psicoterapia Gestalt es un enfoque humanista y existencial de psicoterapia que se centra en ayudar a las personas a tomar conciencia de sus experiencias en el momento presente y desarrollarse de manera más auténtica e integrada.
Se basa en una visión humanista del ser humano, reconociendo que cada persona es única y tiene las capacidades para encontrar sus propias soluciones y enfrentarse de manera satisfactoria en la vida, pero que distintas situaciones difíciles pueden llevarnos a sentir ansiedad y otros malestares.
El trabajo del terapeuta gestáltico es facilitar la toma de conciencia o el “darse cuenta” de la persona de manera integral, es decir, ayudar a ser conscientes de nuestras emociones, sensaciones corporales, pensamientos y comportamientos, y cómo estos se relacionan entre sí. De este modo, buscamos explorar y comprender juntos nuestra forma de funcionar y patrones de comportamiento y pensamiento, así como las formas en que nos relacionamos con los demás. Para ello, ocupamos el diálogo y distintas técnicas que facilitan la toma de conciencia y comprensión de lo que nos ocurre, tales como diálogos de roles, imaginerías guiadas o trabajo con sueños.
A diferencia de otros enfoques de terapia, el rol del terapeuta gestáltico no es interpretar o decir a la persona cómo debiese sentirse o comportarse, sino que facilitar la auto conciencia para restablecer el equilibrio de la persona, asumiendo que cada persona tiene las potencialidades para enfrentar y tomar sus propias decisiones.
El centrarnos en el presente nos ayuda ser más efectivos en trabajar la ansiedad y enfrentar la manera en que aprendizajes pasados nos pueden estar afectando hoy en día. De este modo, la Psicoterapia Gestalt es un medio para ser más conscientes de nosotros mismos, explorar qué es lo que nos impide desarrollar nuestras potencialidades, ser más auténticos en nuestras relaciones, y desarrollar nuestras propias potencialidades para enfrentar los desafíos de la vida de manera integrada.