El autismo es un trastorno del neurodesarrollo que afecta a la comunicación, la interacción social y la conducta. Sus características principales son:
- Dificultad para comunicarse con los demás.
- Falta de interés o habilidades para interactuar socialmente.
- Patrones de comportamiento repetitivos o restringidos.
- En la vida escolar, puede ser difícil para un estudiante autista seguir instrucciones complejas, participar en actividades grupales, o incluso hacer amigos.
Mitos y realidades del autismo
Existen muchos mitos y creencias erróneas sobre el autismo:
- Todas las personas autistas tienen habilidades especiales (como ser un genio matemático).
- Son frías e insensibles.
- Las vacunas causan autismo.
Es importante desmentir estos mitos y comprender que cada persona autista es única y valiosa en su propia manera. En la vida cotidiana, esto puede significar no hacer suposiciones sobre lo que una persona autista es capaz de hacer o cómo se siente, y en su lugar, tratar de conocerlos y respetar sus necesidades individuales.
¿Cuáles son las causas del autismo y cómo se diagnostica?
No se sabe exactamente qué es lo que lo causa. Probablemente tenga algo que ver con el ADN (los genes que los padres pasan a sus hijos) y otras cosas, como las infecciones y las toxinas que modifican la forma en la que se desarrolla el cerebro.
Los padres, el medico e incluso los profesores inician el proceso de diagnóstico cuando sospechan que algo no anda bien en la forma de comunicarse con los demás, falta de interés social o por ciertas conductas peculiares.
Si el médico cree que puede tener autismo, un equipo de expertos (que puede incluir médicos, un psicólogo, un terapeuta del habla, un terapeuta ocupacional y un maestro de educación especial) evaluará al niño.
¿Qué sienten las personas con autismo?
El trastorno con espectro autista afecta a diferentes personas de diferentes maneras:
- Al expresar sus sentimientos. Tal vez parezcan insensibles o distantes.
- Al comprender los sentimientos de otras personas. Pueden ignorar o entender mal cómo otras personas se sienten o se comportan en una situación específica.
- Al comprender los mensajes sociales. Es posible que no entiendan el lenguaje corporal o las expresiones faciales; tal vez se paren demasiado cerca de una persona; ignoran las señales que indican aburrimiento o frustración.
- Al manejar información sensorial. Los ruidos fuertes, las luces brillantes o las multitudes pueden molestarlos.
- Al manejar una nueva rutina. Les puede resultar difícil sentarse en otro lugar o tener un maestro suplente.
- Algunas personas se centran casi exclusivamente en un tema o pasatiempo. Algunos de estos temas suelen ser inusuales, como la Primera Guerra Mundial o variedades de manzanas.
Para profundizar más sobre este importante tema, te invitamos a descargar la siguiente presentación de nuestro psicólogo Patricio Sánchez Luengo.